El turismo es esencial para la economía segoviana, y por ello las marcas promocionales se han enfocado en atraer visitantes externos. Estas marcas, diseñadas desde las demandas externas y proyectadas hacia dentro, han dado lugar a identidades efímeras que no reflejan la esencia ni la personalidad auténtica de la ciudad. Desde el diseño gráfico, esto evidencia una desconexión con la población local y sus problemáticas, que suponen un riesgo para el futuro de Segovia. El enfoque en el turismo y la población flotante ha generado en los segovianos la percepción de que se está descuidando el carácter local de la ciudad.

El proyecto nace por el impulso de rediseñar la identidad de Segovia desde dentro, poniendo a los habitantes en el centro del proceso para captar la esencia de la ciudad y proyectar una imagen auténtica al mundo, así como integrar a toda la población flotante en ese relato. Además, aspira a integrar a toda la población flotante en este relato. Como base, se realizó una encuesta a 168 residentes de diferentes perfiles. El proyecto está pensado en todo momento como un complemento a unas medidas reales para mejorar la ciudad. Desde el diseño gráfico, el objetivo es reforzar la percepción positiva entre la población local.

Es la narrativa central, una metáfora que recoge la esencia de Segovia, su faceta más desconocida, que se muestra cuando te acercas y la conoces de verdad: es un corazón vivo que late con el flujo constante de personas que la nutren. El latido expresa el amor, el hogar y el sentido de comunidad de una ciudad que, por su reducido tamaño, acoge y conecta a quienes la habitan o visitan.

Con esta narrativa, ponemos el punto de partida en el carácter de la ciudad para descubrir su auténtica identidad, al mismo tiempo que promovemos la integración y conciliación entre la población flotante y la local. Queremos comunicar que todos los agentes contribuyen a la construcción de la identidad de Segovia. Además, se presenta a la ciudad como un lugar en constante movimiento, donde las actividades y eventos la mantienen en una continua transformación.

La identidad gráfica gira en torno al esgrafiado segoviano, una técnica ornamental muy presente en las paredes de la ciudad. Este elemento fue elegido por varias razones:

Así nace SGrafoType, una familia tipográfica inspirada en el esgrafiado. Su diseño modular permite recrear patrones tradicionales y crear nuevos motivos. Además, al ser una tipografía variable en anchura, posibilita incorporar el latido de la ciudad, especialmente en el ámbito audiovisual. Este enfoque otorga al esgrafiado un nuevo significado, vinculándolo con la vitalidad y su carácter acogedor.